Pisando aguas Extremeñas.

He dedicado un par de semanas a Orellana, la primera sesión el tiempo no acompaño nada, mucho viento y oleaje en el lugar y la pesca lo notó mucho. Aunque tenía una cosa clara: yo no me iba de Orellana sin sacar mi primera tenca, así fue, conseguí tres de ellas.

 

La siguiente jornada se dio algo mejor, pero no lo que andaba buscando, llegué a la zona que había elegido en casa y los peces estaban desovando en las reculas, un pescador del lugar me comenta que la semana anterior habían salido las hembras grandes y que esta semana nada de nada, los peces estaban a lo suyo. Genial, la primera sesión llego pronto y la ultima me retraso una semana, vaya suerte.

Sondeé el lugar y demás y decidí pescar tres zonas diferentes, la primera, obviamente en una recula con apenas un metro de profundidad, la siguiente a la entrada de la recula con tres metros de agua y por último a embalse abierto. el resultado fue muy curioso: el primer día recibí tres picadas en la recula, el siguiente día ya no había peces en la recula y recibí dos picadas a la caña que entraba la recula y terminaron entrando en embalse abierto

Todas las capturas fueron machos entre 9 y 12kg, ni rastro de las hembras.

Típico regalito en la moqueta...

 Un par de royales..., algo escasas en el lugar.

Temperaturas muy altas estos días, rozando los 35 grados en la zona.
El calor y sobretodo la alergia me hizo volver un par de días antes de lo previsto a casa ya que había momentos en los que realmente lo estaba pasando mal.

Este pez me despertó por la mañana y realmente me alegro el día.

Y esto ha sido todo en estas jornadas, esperemos que la próxima que me pegue la paliza para bajar a Extremadura se de mejor.